Los y las
militantes de Izquierda Anticapitalista, el viernes en la
manifestación de Torrelavega, quedamos primero sorprendidos, más
tarde indignados y finalmente entristecidos por la atropellada
invasión y ruptura de la manifestación de trabajadores que
protagonizó el cortejo del bloque crítico al grito de “unidad
obrera y sindical”.
La
manifestación había sido convocada por la Coordinadora Social del
Saja-Besaya, como un paso hacia la unidad obrera y a la que habían
sido invitados todos los partidos y sindicatos del bloque, y tanto el
lema de la pancarta de cabecera (¡Hay que echarlos!) como el
manifiesto final en nada contradecían las consignas que se gritaban
desde el cortejo del Bloque Critico.
Creemos
que la unidad se construye día a día y en base a acuerdos concretos
de mayor o menor alcance. La situación del Besaya exige hoy unidad
de acción en la izquierda, que es y debe seguir siendo plural.
Nosotros y nosotras hemos creído que la formación de una
coordinadora de todas las fuerzas de izquierda era el camino para
llegar a acuerdos. Vosotros sabréis porque no habéis participado.
En todo caso, si pensabais que vuestras posiciones eran radicalmente
distintas, bien podíais haber convocado vuestra propia manifestación
o como hemos hecho tantas veces haber montado vuestro cortejo al
final de la convocada por la coordinadora. Todo antes de irrumpir
atropelladamente contra una manifestación obrera, equivocándoos
absolutamente de enemigo.
Todas las
acciones tienen sus consecuencias y los acontecimientos de ayer
probablemente consigan que muchos torrelaveguenses se lo piensen dos
veces antes de acudir a manifestaciones en las que la izquierda
presenta tales espectáculos. Quienes se preocuparán serán los
trabajadores de Sniace y de toda Torrelavega que hoy lo tienen más
dificil que ayer. Y quienes se alegrarán sin duda serán el
PPSOEPRC, que saben ahora que no tienen de qué preocuparse.
Os
pedimos que reflexionéis, que volváis a reconocer al verdadero
enemigo (que es también el nuestro), que recuperéis la lealtad
política con todos los compañeros y compañeras de izquierda (por
encima de las diferencias) y avancéis de verdad hacia la unidad
obrera, que no es sólo una consigna y no se consigue de la noche a
la mañana. Nadie es más de izquierdas por gritar más alto y llamar
a la huelga general comarcal si no es capaz de convocarla y de hacer
que tenga éxito. Por eso necesitamos que la unidad sea amplia y
comprometer en ella a los sindicatos mayoritarios. Vuestra
participación es igualmente importante, pero de manera leal y con
voluntad de unidad.
